Saturday, January 28, 2012

Orígen de los celos

La adaptación es un concepto muy importante en la teoría de la evolución de Darwin. Esto significa que los organismos cambian con el tiempo como resultado de la selección natural o sexual para aumentar la supervivencia y el éxito reproductivo. Esto ocurre cuando los organismos mediante la obtención de ciertos rasgos obtienen una ventaja o resuelven un problema de adaptación.
Mecanismos psicológicos también han evolucionado para resolver los problemas de adaptación que nuestros ancestros enfrentaron. Por ejemplo, durante nuestra historia evolutiva, como resultado de la ovulación oculta de las mujeres y la sexualidad ampliada, los hombres nunca pueden estar seguros acerca de su paternidad, a diferencia de las mujeres, que siempre están cien por ciento seguras. Según David J. Buller (2005) ya que los hombres y las mujeres tuvieron que enfrentar estas diferentes amenazas a sus intereses reproductivos, ambos sexos se han desarrollado los celos, pero a través de diferentes mecanismos para resolver este problema de adaptación. Por ejemplo, si un hombre piensa que su mujer es infiel, confunde su paternidad, exponiéndolo al riesgo de invertir su tiempo y recursos en los hijos de otro hombre. Esta situación ha predispuesto a los hombres a concentrarse en las señales de la infidelidad sexual, mientras que las mujeres se centran más en las señales de infidelidad emocional, ya que una relación emocional de su pareja con otra mujer puede resultar en la pérdida de los recursos y la inversión de el en la familia.
Los celos y la atención a las señales de infidelidad han sido diseñados por la selección natural para reducir la confusión de paternidad y pérdidas en las relaciones, involucrando a hombres y mujeres en conductas de retención que al final tratan de aumentar el éxito reproductivo de sus propios genes.

¿Están de acuerdo con la conclusión que las mujeres sienten más rabia ante una infidelidad emocional, mientras que los hombres sienten más rabia ante una infidelidad sexual? Algunas experiencias?


* Buller, J. David. (2005). Adapting minds: Evolutionary psychology and the persistent quest for human nature. The MIT Press, 318-320.